El amor todo lo puede y todo lo soporta, esta historia es prueba de ello, mis tres hermanos y yo hemos pasado mil cosas juntos y a pesar del tiempo y la distancia nuestra relacion sigue intacta. Cuando pierdo la fé en el mundo y en las personas, pienso en cada uno de ellos y de inmediato recuerdo que vale la pena querer y confiar....



Monday, October 25, 2010

Tienes tiempo de sobra (42)

Ultimamente parece que no me alcanzan los días, desde que comencé a trabajar todo ha cambiado, hace mucho que no escribo, y hace mucho que no leo, a veces me siento culpable por los cuatro libros que abandoné despues de tan solo unos cuantos capítulos. Hay tanto por saber, por conocer, hay tantas historias que contar, tanto que recordar, tanto que compartir, pero la verdad, es que el tiempo no me alcanza. O al menos eso pensé hasta hoy.

Los días transcurren en una constante carrera, una competencia sin oponentes, tratanto de hacer todo lo que debo (según quien, no lo sé) hacer, ser la madre perfecta, la esposa perfecta, la hermana perfecta, la amiga perfecta, la hija perfecta, etc. Y a los pocos segundos de haber comenzado esta carrera, me doy cuenta que la perdí hace mucho, que la perfección solo le pertenece a Dios y que mi trabajo es hacer mi mayor esfuerzo y disfrutar de esta vida, la única que tengo, la que El me ha dado.

Este fin de semana se fue en un abrir y cerrar de ojos, pero gratamente puedo decir que tuve tiempo de compartir con mi familia, con amigos y sobre todo con Dios, tuve tiempo de limpiar mi casa, hacer el laundry, cocinar y preparar a la familia entera para el comienzo de una nueva semana.

Tuve tiempo de besar a mi esposo a quien tanto amo y de admirar la sonrisa de mi hijo (es una de mis actividades favoritas) no me canso de hacerlo.

Cuando estoy haciendo aquello que me hace feliz, el tiempo se detiene, cuando pienso en aquellos a quienes amo y extrano, el tiempo se detiene, es como si Dios y la vida me dieran la oportunidad de viajar en el tiempo y en el espacio a los lugares y momentos en los que he sido mas feliz, cuando vuelvo a la realidad, no puedo parar de sonreir y de dar gracias por las multiples bendiciones derramadas sobre mi vida, tengo todo para ser feliz.

Por eso ya no quiero ser esclava del tiempo, quiero disfutar plenamente de cada dia en el que tengo el inmenso privilegio de abrir los ojos y respirar, quiero vivir.

Y cuando siento que las horas y los días no me alcanzan, que hay mas ropa por lavar y doblar, viajes al supermercado por hacer, que debo desenpolvar los libros que no he leído, abrir la computadora y comenzar a escribr, que debo llamar a mis amigos y a mi familia más seguido, que debo responder a mis emails con mayor disciplina, me digo a mi misma, no te preocupes Mary Anna, tienes tiempo de sobra.

Thursday, October 7, 2010

El rompecabezas (41)

Mis días y semanas transcurren entre las calles de Caracas y la ciudad de Maracay, tratando de darle sentido a este complicado rompecabezas que es la vida. Cada pieza tiene un lugar específico, ya asignado, elaborado, para al final formar una imagen perfecta que refleje nuestra realidad ideal, el problema es que no es fácil saber donde van las piezas, y cada movimiento equivocado, significa muchas veces volver a empezar. El problema es que la realidad ideal sólo es una utopia. Pero a veces, si a veces, logramos colocar piezas claves en el sitio correcto, y obtenemos lo que yo llamo muy inocentemente "momentos ideales". Son esos momentos los que le dan color y sentido a nuestra vida, los que dibujan una sonrisa en nuestro rostro, los que nos permiten amar libremente, y aceptarnos tal y como somos.
Yo les confieso que muchas veces me dejo llevar por la dinámica natural del juego, y me paso el tiempo pensando donde poner las piezas con miedo a equivocarme y es esa trampa me paraliza y me impide disfrutar de mis pequeñas pero muy significativas victorias.
Es un proceso, un aprendizaje que sabemos nunca terminara, pero siempre tendremos la oportunidad de comenzar de nuevo, de limpiarnos las rodillas después de la caída, a veces con ayuda y a veces solos, y seguir adelante, no podemos detenernos.

He tenido la bendición (porque no lo puedo llamar de otra manera) de tener las mejores y mas interesantes conversaciones con Alberto, a veces nos quedamos hasta casi el final de la noche, recordando, riendo y muchas veces soñando ahora que somos adultos, o casi adultos, nos entendemos de una manera distinta, confiamos el uno en el otro, nos respetamos, nos protegemos, tenemos la certeza que aunque estemos lejos, siempre estaremos cerca, eso nos tranquiliza a ambos. Creo que esa es, en mi humilde opinión la mejor definición que he encontrado de FAMILIA.

No sé si la próxima vez que mueva una de las piezas del rompecabezas, va estar en el sitio correcto o si me voy a equivocar, pero sea cual sea el resultado, voy a celebrar dos cosas, la primera es que estoy tomando acción, y la segunda y más importante es que tengo con quien compartir mis tristezas y mis victorias.

Y tu?