Mis días y semanas transcurren entre las calles de Caracas y la ciudad de Maracay, tratando de darle sentido a este complicado rompecabezas que es la vida. Cada pieza tiene un lugar específico, ya asignado, elaborado, para al final formar una imagen perfecta que refleje nuestra realidad ideal, el problema es que no es fácil saber donde van las piezas, y cada movimiento equivocado, significa muchas veces volver a empezar. El problema es que la realidad ideal sólo es una utopia. Pero a veces, si a veces, logramos colocar piezas claves en el sitio correcto, y obtenemos lo que yo llamo muy inocentemente "momentos ideales". Son esos momentos los que le dan color y sentido a nuestra vida, los que dibujan una sonrisa en nuestro rostro, los que nos permiten amar libremente, y aceptarnos tal y como somos.
Yo les confieso que muchas veces me dejo llevar por la dinámica natural del juego, y me paso el tiempo pensando donde poner las piezas con miedo a equivocarme y es esa trampa me paraliza y me impide disfrutar de mis pequeñas pero muy significativas victorias.
Es un proceso, un aprendizaje que sabemos nunca terminara, pero siempre tendremos la oportunidad de comenzar de nuevo, de limpiarnos las rodillas después de la caída, a veces con ayuda y a veces solos, y seguir adelante, no podemos detenernos.
He tenido la bendición (porque no lo puedo llamar de otra manera) de tener las mejores y mas interesantes conversaciones con Alberto, a veces nos quedamos hasta casi el final de la noche, recordando, riendo y muchas veces soñando ahora que somos adultos, o casi adultos, nos entendemos de una manera distinta, confiamos el uno en el otro, nos respetamos, nos protegemos, tenemos la certeza que aunque estemos lejos, siempre estaremos cerca, eso nos tranquiliza a ambos. Creo que esa es, en mi humilde opinión la mejor definición que he encontrado de FAMILIA.
No sé si la próxima vez que mueva una de las piezas del rompecabezas, va estar en el sitio correcto o si me voy a equivocar, pero sea cual sea el resultado, voy a celebrar dos cosas, la primera es que estoy tomando acción, y la segunda y más importante es que tengo con quien compartir mis tristezas y mis victorias.
Y tu?