Hoy me levante pensando en tí, sabiendo que tus calles estan mojadas, no solo por la lluvia que ha sido inclemente contigo desde hace días, sino por las lagrimas de quienes te amamos con el corazón, lagrimas que derramamos cada vez que te vemos sufrir, cada vez que uno de tus hijos pierde su casa, cada vez que uno de tus niños se levanta con hambre.
Hoy te pienso mas que nunca, te recuerdo, te siento, te huelo, te escucho y hasta te veo.
Hoy quisiera estar contigo para ayudarte, para consolarte a ti y a los tuyos, que también son míos, pero quisiera estar fisicamente no sólo de corazón. De corazón estoy todos y cada uno de los días, de corazón nunca me he ido, de corazón nunca me iré.
Hoy no quiero escuchar a los que se quejan y te critican, no quiero escuchar a los que solo piensan en política y en enemigos y no en unirnos y sacarte adelante. Hoy me siento con derecho a opinar aunque muchas veces calle por sentirme culpable por haberte abandonado.
No puedo decir que solo hoy te quiero, porque te quiero todos los días, porque me acuerdo de ti cuando hablo, por ese acento que llevo con orgullo, por mis costumbres, mi cultura, te quiero siempre y si es posible cada día más.
Te amo Venezuela.