Los sueños deben ser invencibles.

Me resulta dificil volver a escribir después de tanto tiempo, retomar una historia cuando ya no recuerdo ni donde quede. Remover el pasado no es fácil, con los buenos recuerdos tambien vienen algunos que prefiero olvidar.


Asi que aqui estoy, tratando de retomar mi historia, dejando a un lado al resto del mundo, los niños, mi esposo, mi casa, el teléfono, y todo aquello que pueda distraerme  para concentrarme en contar mi presente y tal vez, un poco de mi pasado, porque extraño esta ventana que me conecta a un mundo a veces desconocido, donde nunca se sabe a donde van a llegar estas lineas, quien las leera y cual será su historia.

Escribir es uno de mis sueños. De esos sueños que poco a poco se van haciendo realidad, pero que a la vez requieren compromiso y trabajo duro, yo sé que todos tenemos esos suenos, esa realidad no es ajena para nadie. Sin embargo, siempre hay alguién que con o sin intención trata de truncar tu sueños, se ríe de ellos sin pensar en el efecto que eso puede generar.

Hace poco me paso algo muy similar, pero en lugar de desanimarme y renunciar, decidí  usarlo como una herramienta más para continuar, para seguir adelante a mi propio ritmo y sin rendirle cuentas a nadie.

Es que a los soñadores, nos toca difícil, no basta con tener el sueño, tenemos que tener el compromiso y la disciplina primero, luego viene el trabajo duro, el esfuerzo, las lagrimas, la frustración, el tiempo que toca invertir y además las fuerzas y energía para superar e ignorar a aquellos que por razones desconocidas se dan a la tarea de golpear con palabras nuestros frágiles y a veces pequeños logros.

Amigos soñadores, no desmayen, no estan solos, somos muchos, luchando en silencio por lograr aquello tan ahnelado. Por eso sigo adelante con más fuerza que nunca, porque la unica forma de que mis sueños no se hagan realidad. Es que renuncie a ellos.